El tipo de iluminación que puede salvar al mundo
La luz eléctrica es un beneficio que la ONU ha proclamado como derecho humano básico, es difícil imaginarse un mundo sin la luz, hemos sido tan dependientes de este servicio que todo el mundo funciona las 24hrs con la iluminación. Muchos nos hemos preguntado cuando nos ha costado generar toda esta enorme capacidad eléctrica para alimentar las viviendas en todo el mundo. Sabemos de antemano que la industria eléctrica continúa trabajando con combustibles fósiles que continúan afectando poco a poco los ecosistemas y la generación de iluminación es tanta que los incluso muchos continúan utilizando focos contaminantes, El foco tradicional incandescente es una pieza de tecnología muy ineficiente, y ha tenido muy pocas mejoras desde que se crearon los originales a finales del siglo XIX.
A nivel mundial, el 20% de la energía que generamos se usa para iluminar, lo que significa, entre otras cosas, que en aras de penetrar la oscuridad liberamos tres veces más dióxido de carbono que toda la industria de aviación.
Afortunadamente, los científicos e ingenieros desarrollaron una opción que puede ser la solución y hablamos específicamente de la iluminación LED, los LED han existido desde los años 60, pero sólo ahora están generando el entusiasmo que se merecen.
La razón es que los avances en su diseño implican que pueden reemplazar los focos de filamento en la mayoría de lugares. Como usan una fracción de la energía para crear luz, este sencillo componente electrónico podría tener un efecto global.
El bombillo anteriormente era el artefacto de iluminación mas usado, sin embargo, su consumo eléctrico era demasiado además que cuando se rompía no había manera de repararlo contribuyendo al alto índice de contaminación que existe hoy en día, en cambio la iluminación LED solo utilizan el 10% de todo el consumo energético de una casa, y la construcción de un LED también es muy interesante para comprender su funcionamiento.
Adentro de un led hay dos capas de un material especial hecho de semiconductores. Una capa contiene muchos electrones energéticos y la otra está llena de huecos, que realmente son enlaces químicos entre átomos rotos.
Cuando se conecta un led a una batería, los electrones y los huecos fluyen hacia el lugar en el que las dos capas del semiconductor se unen. Apenas un electrón se encuentra con un hueco en esa región, cae en él, y repara el enlace químico. En un destello, libera la energía que estaba usando para moverse en forma de luz brillante y con el desarrollo de nuevos tipos de conductores, los científicos los están mejorando constantemente, de manera que en unos pocos años podrán ser 10 veces más eficientes que los focos de luz incandescente de la misma brillantez. No cabe duda que la iluminación LED abrió una brecha tecnológica que permite la reducción de consumo de energía eléctrica y aporta mucho para el medio ambiente impactando positivamente en nuestra sociedad.
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