La descarga electrostática:
El mayor responsable de las explosiones inexplicables.
Actualmente, existen muchas empresas que continúan utilizando líquidos flamables o polvos combustibles, sin estar conscientes de los enormes riesgos que estos pueden presentar ya sean incendios o explosiones en las instalaciones, dejando de lado las medidas necesarias para poder trabajar en las óptimas condiciones. A pesar de que se creó la directiva RD 618/2003 que funge como protocolo de Protección Contra Explosiones (PCE), muchas empresas continúan ignorando los pequeños detalles que puedan provocar un siniestro.
El protocolo PCE obliga a las empresas a realizar una evaluación de todas las fuentes de ignición efectivas tipificadas en las normas de referencia, también el mismo protocolo incluye la clasificación de zonas ATEX y evalúa la presencia de fuentes de ignición efectivas en dichas zonas, estas fuentes de ignición en términos generales son zonas o causas de posibles explosiones en las empresas.
La seguridad industrial juega un rol muy importante en este tipo de protocolos, ya que evaluar correctamente el riesgo de explosiones es primordial para saber si estamos en las condiciones seguras o, por el contrario, se deben tomar medidas correctivas. El siguiente paso evidentemente es conocer qué medidas son las adecuadas y cuál es la mejor opción a implementar en cada situación. Uno de los principales problemas, a la hora de realizar una correcta evaluación de riesgo de explosión, es prestar atención a posibles acciones que puedan desencadenar un siniestro, quizá jamás habías pensado en un detalle que ha sido la culpable de desencadenar una explosión sin que lo hubieras notado. Aunque no lo creas las prendas que deben utilizarse en una zona de posible peligro deben ser las adecuadas para que este preciso factor no se involucre y es “La descarga electroestática” la principal causa.
Debido al desconocimiento mencionado, se tiende a abordar el tema de dos maneras muy opuestas:
• Sobreprotegernos mediante la adquisición de equipos y sistemas complejos, caros y sobredimensionados.
• Pasar muy por encima, sin evaluar a fondo toda la casuística y dejar la instalación en parte desprotegida.
No estaría mal que las empresas que corren por este peligro pusieran la suma atención a este impredecible factor, pues pone en riesgo no solo la vida de los trabajadores, desestabiliza la productividad y a pesar de causar pérdidas humanas, también golpea la economía y estabilidad de la empresa, pero muy aparte del tema económico, son las vidas humanas a las que se le debe dar prioridad, recordemos que estas ya no pueden regresar y no hay nada peor que cargar con eso en la conciencia.
